Ayer, la comunidad de jugadores recibimos la peor noticia del mundo que se nos podría haber dado... Bueno, quizá sea una exageración porque tampoco se muere nadie por lo que ha pasado, pero está claro que el retraso de The Legend of Zelda: Breath of the Wild 2 a 2023 fue un palo muy gordo. Pero yo ya ayer, hablándolo en privado con amigos, decía que me resultó muy raro; el juego estaba fechado para 2022 y todavía quedan 9 meses por delante. ¿Por qué no anunciar el retraso más adelante?
Pero bueno, muchos creerán que es porque cuanto antes mejor, sin más. Y seguramente hasta tengáis razón, pero también es cierto que el retraso de Breath of the Wild 2 es bastante parecido al de otros dos casos de la saga que son relativamente recientes y que desembocaron en dos desenlaces muy, muy parecidos. Y si ese es el caso del nuevo juego de Nintendo que ya saldrá en 2023, podríamos estar ante la primera pista de una nueva consola.
A ver, esto es muy teórico e hipotético. Por eso lo llamo a este post "artículo" y no "noticia", porque es algo que me he sacado un poco de la manga pero me parece muy interesante traeros para tenerlo en cuenta. ¡Vamos allá!
A ver, también quiero mencionar que muchos creen que no habrña una Nintendo Switch Pro ni que en 2023 saldrá otra consola. Peeeeero... imaginad que esta teoría fuese verdad. En ese caso, si quisieran lanzar el juego junto a otra consola pero esta no fuese a salir hasta 2024, ¿podría darse el caso de que vuelvan a retrasar Breath of the Wild 2 para 2024? Bah, lo dudo mucho, ¡pero ahí queda la teoría! Decidme en comentarios qué pensáis ^^
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