Lo que de cara a la galería se ha tomado como un simple cambio de cara, en el fondo implicará una reestructuración mucho más profunda de la saga. Piratas del Caribe se enfrenta ya a su próxima entrega, y lo hace sin la participación de Johnny Depp, la estrella que llevó la franquicia a lo más alto, y se implicó en la producción de las películas hasta el punto de condicionar por completo sus historias, y suponer un desembolso considerable para Disney.
Si bien la decisión de la compañía se interpretó como un movimiento para evitar manchar la imagen de las saga por las polémicas personales de Depp, la realidad tiene que ver más con el aspecto económico. Sí Rhett Reese y Paul Wernick le darán "una patada" al pasado en todos los sentidos, y evitarán mencionar al capitán, pero además Disney se ahorrará un buen dinero.
Tal y como revela Forbes, la salida de Depp de Piratas del Caribe le ahorrarán a la compañía nada más y nada menos que 90 millones de dólares. Los mismos que tuvo que desembolsar por su participación en la última película de la saga. Y es que además de protagonizarla, el actor también participó -de manera indirecta- en el desarrollo del guion firmado por Jeff Nathanson.
Sin él en la próxima película, los guionistas de "Deadpool" tendrán libertad creativa plena, y Disney no se verá obligada a mantener un icono atado a un caché que no había dejado de crecer en los últimos años. Ahora los desafíos de la compañía tendrán que ver más con la construcción de un universo totalmente dependiente de la imagen de Jack Sparrow. Pero no todo son noticias preocupantes para la marca.
En el pasado Reese y Wernick ya han demostrado de lo que son capaces si se les da plena libertad para actuar, y Piratas del Caribe podría cambiar por completo como resultado de su estilo hacia una comedia negra más cercana a lo visto con el Mercenario Bocazas. Ahora bien ¿Conseguirá la saga sobrevivir sin Sparrow? Su sombra se ha hecho tan alargada con el paso de las películas, que resulta complicado imaginar una historia en ese universo sin sus comentarios ácidos y ese tambaleo al caminar.
No hay ni fecha de estreno, ni reparto, ni detalles de la trama. Disney tiene tiempo más que suficiente para buscar un sustituto que esté a la altura de las circunstancias, y lidere el futuro tan prometedor que el estudio tiene preparado para los piratas. Para los nostálgicos que todavía no consiguen hacerse a la idea de la marcha de Depp, tendrán una oportunidad de reencontrarse con él el próximo enero en Kingdom Hearts III. Esa será su despedida real de los sombreros tricornio.
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