Después de desvelar en el pasado mes de diciembre Xbox Series X con su aspecto y algunos detalles, Microsoft ha vuelto a dar la cara hoy en lo que respecta a su consola de próxima generación. La información desvelada hoy se ha enfocado principalmente en datos sobre el hardware con el que cuenta Xbox Series X y la potencia que estas piezas permiten que la máquina posea. Pero entre todo ello también se han dado nuevos datos relativos a la retrocompatibilidad, la cual permitirá unir en una sola consola cuatro generaciones de videojuegos.
Tal y como se ha hecho público a través del blog oficial de Xbox, "los beneficios de la consola de próxima generación se extienden en todas direciones, ofreciendo mayor fidelidad visual y tiempos de carga mejorados a nuestro legado ya existente de videojuegos, además de nuevos títulos". "Mantenemos nuestro compromiso con la compatibilidad con Xbox Series X e invertimos en tecnología que hace más fácil poseer videojuegos a través de diferentes generaciones", se explica.
De forma concreta, son tres las claves de esta retrocompatiblidad:
La primera de las claves es unir cuatro generaciones de videojuegos en una única consola. Según han confirmado, Xbox Series X poseerá retrocompatibilidad total con los videojuegos de Xbox One, incluyendo aquellos de Xbox 360 y la Xbox original que ya son retrocompatibles en esta plataforma. Todo ello, según se afirma, sin requerir ningún tipo de trabajo extra por parte de los desarrolladores de las obras.
Además, todos los accesorios de Xbox One serán compatibles con Xbox Series X, por lo que se reduce de manera importante el gasto en numerosos periféricos que los usuarios de Xbox One ya poseerán.
Una de las novedades más destacadas es el llamado Smart Delivery. Se trata de una tecnología que hace mucho más fácil el salto generacional y evita que tengamos que comprar dos veces el mismo videojuego para disfrutar de la mejor versión del mismo.
A través de esta tecnología, según se explica, nuestra consola Xbox Series X podrá detectar que, aunque iniciemos la versión de Xbox One de un videojuego, tendremos disponible la versión más avanzada del mismo. Es decir, que si compramos la versión de Xbox One de un juego que esté disponible tanto en One como en Series X, al iniciarlo desde una Xbox Series X obtendremos la versión del juego de esta consola y no la de One.
Desde el blog afirman que esta tecnología estará disponible para todos los títulos propios de Xbox Game Studios, incluyendo Halo Infinite. En cuanto a juegos de terceros, Microsoft dará las herramientas necesarias a los estudios para realizarlo y será decisión de estos si se aprovechan del Smart Delivery o no.
Xbox Game Pass ha sido una de las claves de la apuesta de Microsoft de cara a la recta final de la vida de Xbox One; y una que ha dado un resultado especialmente bueno. Es por ello que la compañía de Redmond va a seguir apostando por este servicio de cara a Xbox Series X, siendo uno de los platos fuertes de esta retrocompatibilidad.
Según se explica, Xbox Game Pass llegará a Xbox Series X ofreciendo su extenso catálogo desde el principio e incluyendo todos los juegos propios de Xbox Game Studios desde su lanzamiento como parte de su apuesta.
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