FIFA 21: review de Dembélé IF. ¿Una ganga o demasiado caro?

Continuamos con las reviews de jugadores de la Liga Santander. Recientemente publicamos los artículos de Mario Hermoso, Iñaki Williams y Luka Modric FUT Birthday. Hoy toca hablar sobre Dembélé IF, carta que aparece en la banda derecha. ¿Es un futbolista competitivo que soluciona la escasez de opciones útiles en ese puesto? ¿Es una ganga por sus estrellas o está sobrevalorado? Respondamos estas preguntas.

Análisis de Dembélé IF

Sin ningún tipo de duda, la gran cualidad de este atacante es que cuenta con cinco estrellas de skills y pierna mala. Esos recursos le permiten que, aunque falle claramente en muchos aspectos, sea peligroso y decisivo dentro del área. Un jugador con capacidad para generar sus propias ocasiones.

La conducción de balón de Dembélé IF es mejorable, sobre todo porque es afectada por sus condiciones físicas. Con Rematador como química, consigue grandes números de agilidad (99) y dribling (99), además de un interesante 88 en balance. Pero la reacción se queda en 80 y la compostura apenas llega a 82. Como este estilo no aumenta su 94 de ritmo y apenas tiene 55 de fuerza, es un jugador endeble al que pueden derribar con facilidad cuando corre a máxima velocidad. No tiene ni la chispa ni la fortaleza de otros atacantes. Aunque sí es un futbolista especial cuando ejecuta filigranas, movimientos como la elástica funcionan genial con él.

Su físico es pésimo, el principal punto débil. Si queremos aumentar bastante aspectos como el regate o el pase, no podemos mejorar su velocidad y tendrá 95 de aceleración y 94 en sprint. No son atributos horribles, pero funcionan aún peor por culpa del 73 en stamina. Ousmane no es un jugador para colocar pegado en banda, porque estará reventado en las segundas partes. Y si nos enfrentamos ante rivales con defensores contundentes, sentiremos sus defectos con claridad en los partidos más igualados. Con esa baja resistencia, apenas puede ser utilizado como delantero centro o mediapunta si no baja a defender.

Su disparo también es pobre pero, con Rematador como química, no funciona tan mal como podríamos pensar. No es un goleador de primerísimo nivel, aunque sí marca muchas ocasiones claras porque su 79 natural de finalización sube a 94 y el 87 en potencia de tiro llega a 97. Al contar con cinco estrellas de skills y pierna mala, Dembélé IF no es uno de los futbolistas más precisos de FIFA 21 pero sí genera muchas oportunidades y acierta en bastantes ocasiones. Así que con este aspecto cumple y es muy aprovechable por todos sus recursos dentro del área.

El pase es insuficiente para este momento de la temporada. Un extremo que cuesta más de 300.000 monedas no puede quedarse en 79 de visión y 81 de pase en corto. Podríamos mejorar bastante esos atributos con Tirador, pero entonces no subiría el regate y no sería tan desequilibrante ante los defensores. Así que debemos conformarnos con sus imprecisos envíos. No es un jugador que asista al espacio con facilidad y en partidos muy competidos solemos notar esta debilidad.

Incluso como delantero centro y sin obligaciones defensivas, es normal que llegue muy cansado a los últimos minutos. Ante adversarios asequibles no es demasiado preocupante, pero sí afecta muy negativamente cuando nos enfrentamos a alguien igual de bueno que nosotros o superior. Si no podemos dominar al rival, es lógico que Dembélé IF baje muchísimo su rendimiento a partir del minuto setenta.

Otra limitación habitual es que, por sus condiciones físicas y no aumentar el ritmo con la química, es un futbolista al que le cuesta una barbaridad ser importante ante defensas adelantadas. Si nuestro contrincante decide poner a sus centrales a la altura del centro del campo, Ousmane no es un jugador que castigue los errores fácilmente, que sea capaz de correr hacia la portería a máxima velocidad mientras forcejea con su emparejamiento. Claramente, es un jugador que funciona mucho mejor cuando recibe la pelota dentro del área.

Así que Dembélé IF es una carta especial por las cinco estrellas de skills y pierna mala, porque cuenta con bastantes recursos para generar espacio y chutar. Su disparo no es de los más efectivos, aunque sí adecuado para marcar la mayoría de ocasiones claras. Sin embargo, para disfrutar de sus habilidades debemos soportar todos los puntos negativos. Su enorme debilidad física, su limitación ante presiones adelantadas y su flojo pase. Lo más preocupante la stamina, se cansa demasiado rápido. De hecho, solo aconsejamos usarlo por dentro. No tiene resistencia suficiente para jugar en banda.

Entonces, ¿Merece la pena?

Pese a su facilidad para crear oportunidades dentro del área, es una carta que no interesa relación calidad/precio. Es bueno cuando recibe el balón en los metros finales y encara al último hombre, aunque tiene demasiados defectos como para costar más de 300.000 monedas. Y su principal problema es que depende del planteamiento del rival. Dembélé IF es un jugador que, si nuestro adversario decide adelantar la línea defensiva, será muy complicado que pueda destacar. No es un asistente de nivel y tampoco sabe atacar con espacios.

Podemos hacer jugadas maravillosas con Ousmane encadenando filigranas. Pero su físico es muy molesto en los partidos más igualados y, en cuanto le exijamos alguna que otra carrera extra, bajará mucho su rendimiento durante las segundas partes. Aunque escasean las opciones competitivas en el puesto de extremo diestro, su coste actual es muy alto para el nivel que tiene. Cuenta con grandes cualidades, pero también con carencias graves. Y en ningún caso aconsejamos usarlo como extremo puro. Su posición ideal es la de DC, para que corra lo menos posible.

Hay jugadores con menos estrellas que son más completos, que desentonan menos en los partidos de máxima exigencia. Como la versión What If de Tello que apareció en SBC o Januzaj Trasfondo, la recompensa de la anterior temporada. Aunque no lleguen a cinco de skills o pierna mala, sí saben hacer daño a defensas adelantadas, pueden asistir a sus compañeros con frecuencia y no debemos preocuparnos por sus resistencias.

En caso de que no tengas a ninguna de estas alternativas, no es mala opción crear un híbrido con cartas de otras ligas. Recientemente han aparecido extremos muy interesantes como Diatta What If o Perisic FUT Birthday. E incluso podrías poner a Marcos Llorente SIF para que juegue como centrocampista, y pasar a la banda a un atacante que coloquéis por dentro.

Así que Dembélé es desequilibrante dentro del área, pero tiene demasiados defectos como para justificar su precio actual. No merece la pena pagar tanto con él, más aún en este momento de FIFA 21.

Estilos de química recomendados

-Rematador: gana bastante habilidad regateando porque sube tanto la agilidad como el dribling a 99. También mejora cinco puntos de balance, su finalización llega a 94, la potencia de tiro a 97 y el posicionamiento a 86. Este último atributo sí queda bajo y, como tampoco destaca por su velocidad, no es demasiado peligroso con espacios.

-Tirador: alternativa si queréis que sea más fiable como pasador. Mejora quince puntos el pase en corto y diez la visión. También sube diez puntos de posicionamiento en vez de cinco y su potencia de tiro llega a 99. La parte negativa es que no aumenta el regate y la finalización baja cinco puntos respecto a Rematador.

-Cazador: válido si queréis que su ritmo sea perfecto y sea más útil con espacios. Aunque no mejora ni el pase ni el regate. Y de todas formas, seguirá sin ser un futbolista espectacular ante defensas adelantadas por culpa de su stamina.

Esperamos que el artículo te haya gustado. Aquí tienes un equipo competitivo y de bajo precio, que apenas cuesta un millón y medio de monedas. Si quieres consultarnos cualquier costa, puedes hacerlo mediante Twitter (@utaldia).