Dirigida por Chloe Okuno, El extraño supone el debut en solitario de una directora que probó suerte en 2021 con V/H/S/94. Y al igual que en aquella ocasión en la que compartía responsabilidad, la cineasta cae en los tópicos más manidos del thriller psicológico y el terror para dar forma a una película correcta, pero insuficiente. Si quieres conocer mi opinión, puedes leerla bajo estas líneas. Y si quieres ir al cine a ver El extraño, se estrena el próximo viernes 17 de marzo con distribución de Universal Pictures.
Un thriller psicológico que tiene poco de terror
El extraño se vende como un thriller psicológico con tintes de terror, pero ni mucho menos es una película de miedo. Lo primero sí, creando en todo momento la sensación de paranoia en torno a la protagonista. Durante los 98 minutos que dura la película, no dejamos de dudar acerca de lo que ella ve. ¿Será real? ¿Se lo está imaginando? ¿Y si la persona que la persigue no está en los lugares por los que ella transita más que por curiosidad? ¿Y si es ella la acosadora? Sin embargo, cuando se mete de lleno en el terror, se abusa de recursos ineficaces como los jumpscares, la música demasiado elevada y las elipsis espaciales.
Alegato feminista (a medias)
En determinado momento, El extraño se convierte en un alegato feminista. Si tú me miras, yo te miro más. Si tu me das miedo, yo te doy más. Pero el guion se olvida de profundizar en este tema y se enrosca en buscar a un culpable. Con lo interesante que hubiera sido reflexionar más acerca del poder de la mirada masculina, en lugar de crear a un personaje que depende totalmente de los hombres: al final, la protagonista se marcha a Bucarest dejándolo todo porque su pareja le anima a ello. Se queda sola mientras el hombre trabaja y la mirada que la observa es, evidentemente, la de una mujer. Alegato feminista, sí; pero no mucho.
Un desenlace que pudo haber sido mucho mejor
El gran problema de El extraño es precisamente su desenlace. Lejos de apostar por un cierre diferente, la directora se somete a las reglas del género y nos regala un espectáculo grotesco, pero por momentos ridículo y barato. En este momento es cuando El extraño pasa de ser un alegato feminista, a una película más de asesinos en serie. Un cambio de tono que destroza un final que podía haber sido mucho más satisfactorio de explorar terrenos como el miedo por lo desconocido, la fobia social o las enfermedades mentales.
El extraño es poco más que una película que verías un domingo por la tarde
Me cuesta mucho suspender El extraño porque a lo largo de sus 98 minutos, hay destellos de brillantez. Chloe Okuno es una directora interesante, que sabe transmitir con la cámara y los silencios la sensación de agobio que padece la protagonista hasta el último momento. Y también sorprende que en lo técnico, la cineasta haya hecho tanto, con tan poco. Sin embargo, es una película plana en el guion, esperando en todo momento giros que nunca llegan y sobresaltos que, en el mejor de los casos, provocan que arquees la ceja.
Como trabajo de fin de carrera es una película sobresaliente, pero como thriller psicológico es uno más. Y ese es el problema de hacer un psico-drama cuando hay miles como el tuyo.
El extraño es un thriller correcto, sin más, que pasará completamente desapercibido. Sin embargo, es dramático que su final no haya sido más redondo, porque hubiera ganado varios enteros
La protagonista y la sensación de paranoia
En lo técnico, se aprovecha muy bien el presupuesto
Netflix, HBO Max, Prime Video, Disney Plus y Filmin, mis plataformas de streaming favoritas. Harry Potter, Marvel, DC, James Bond y Fast & Furious, mis películas comerciales preferidas. La vida es bella, mi película favorita. Así soy yo, y así seguiré.