Esta tarde me he levantado de la siesta con una idea loquísima: imaginarme cómo será el apoteósico final de La casa de papel. Esto lo único que conseguirá es defraudarme mañana cuando vea los últimos 5 capítulos de la serie, pero al menos me habré quedado tranquilo de pensar en el cierre ideal para un servidor. Eso sí, ya os aviso que es probable que tan solo ocurra un 10% de todo lo que voy a decir. O ni siquiera eso, y nada de lo que escriba sea real.
En caso de que acierta todo, me convertiré en la nueva Aramís Fuster y me dedicaré a la videncia durante el resto de mi vida. Y por supuesto, enviaré mi currículum a los guionistas de La casa de papel para que me fichen de cara al spin-off de Berlín que estrenarán en el año 2023.
Lo primero de todo, es que yo creo que la Banda del Profesor sufre una pérdida más: tras la muerte de Tokio, solo quedan en pie Río, Lisboa, Denver, Estocolmo, Manila, Palermo y Hensinki. Son muy pocas personas para lograr salir con vida de un atraco tan complicado como el del Banco de España, y por ello creo que alguien morirá. No más de uno, también os digo (que sino parece que las matanzas las regalan en las rebajas de El Corte Inglés):
Lo cierto es que ha habido momentos en los que pensaba que la Banda moría al completo durante el atraco al Banco de España, pero dudo mucho que Álex Pina, Jesús Colmenar y compañía se la jueguen como ocurrió en Las chicas del cable y maten a todos sus protagonistas, o que estos acaben en la cárcel.
El futuro de La casa de papel pasa porque todos (o casi todos) estén vivos; que tengan una vida feliz en las Maldivas con el dinero que han conseguido, y que de una vez por todas se alejen de todo el ruido que han generado y tengan una vida 'normal'. Que dejen el crimen (porque en realidad la mayoría no eran criminales), y que formen su particular familia.
Y he aquí el giro más dramático de la historia: la inspectora Sierra traicionará a la Banda pese a que su hijo parece haberle dado algo más que instinto maternal. Recordamos que en el baño cogió unas tijeras (o algo parecido, que no tengo la mente tan fresca), y todos comentamos que posiblemente sería para matar a El Profesor, desvelar a la banda y hacerse con la victoria delante de la sociedad. Esto permitiría que el foco mediático se olvidase de sus torturas a Río, y que el CNP le perdone y la reintegre dentro del cuerpo.
Esta opción, por cierto, no es incompatible con la victoria del resto de La Banda, aunque sí con la muerte de Lisboa: o muere Lisboa, o muere el Profesor.
Ahora te pregunto yo: ¿qué final crees que tendrá La casa de papel? Si no quieres contármelo, ¿crees que mi versión del cierre de la serie es coherente? ¿O mis dotes de Aramís Fuster son nefastas?
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