The Witness, el título independiente obra de Jonathan Blow que llegó al mercado el pasado mes de febrero cosechando un gran éxito tanto a nivel de ventas como de críticas (aquí mismo podéis leer nuestro análisis). Sin embargo, el juego no estaba exento de problemas y, en la versión de PlayStation 4, varios usuarios sufrían problemas de mareos al jugar.
Por ello, los responsables del título ya han lanzado una actualización exclusiva de la consola de Sony en la que se incluyen diversas opciones que ayuden a mitigar los problemas de estos jugadores. Entre las nuevas características encontramos la posibilidad de activar o desactivar la retícula, ajustar el FOV (campo de visión) hasta los 100 grados y oscurecer los bordes de la pantalla.
Si aún no lo conocéis, The Witness es un juego de puzzles y mundo abierto que apuesta por una dificultad endiablada y nada de ayuda al jugador, buscando su frustración y haciéndonos volver locos.
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