Miércoles lleva varias semanas siendo número en Netflix, y por ahora, todo parece indicar que seguirá siendo así durante estas Navidades. Eso sí, El nuevo empleado se ha convertido en la serie que casi roba el número 1 al spin-off de La familia Addams. ¿Qué tiene esta ficción televisiva protagonizada por Noah Centineo y Laura Haddock, y por qué se ha convertido en la serie más adictiva de diciembre en Netflix?
Una incipiente abogada de la CIA se ve envuelta en una peligrosa intriga de poder internacional en el momento en el que un antiguo activo amenaza con exponer la naturaleza de su relación a largo plazo con la agencia, a menos que le exoneren de un delito grave. Esta es la premisa de la que parte El nuevo empleado, una serie que me ha recordado bastante a Killing Eve, pero con suficiente identidad como para justificar su mera existencia.
En Prime Video, arrasa Jack Ryan, mientras que en cines triunfan sagas como Misión Imposible o John Wick. Se puede decir que El nuevo empleado coge un poco de estos thriller y lo adapta en un guion juguetón, divertido y repleto de acción. Lo mejor de todo es que las tramas se bifurcan, pero casi todas ellas son interesantes y consiguen sorprender con giros de guion bastante inteligentes. ¿Es innovadora? En absoluto, pero el libreto está muy bien escrito, y aún mejor interpretado por Noah Centineo y Laura Haddock.
Eso sí, me llama mucho la atención que Netflix no haya puesto todo de su parte para que El nuevo empleado brille, dado que la campaña de marketing ha sido, por ser educados, bastante escasa. Quizás la plataforma de streaming confía mucho en su boca a boca, el cual por ahora es positivo. Pero si sus responsables querían su propia Jack Ryan, creo que lo han conseguido.
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